Tulip nos presenta las fantásticas agujas para bordado de alta calidad, también conocidas como agujas para bordado crewel, que son el resultado de más de 30 procesos. Las agujas son afiladas para perforar fácilmente la tela.
Las agujas son templadas por calentamiento y enfriamiento estrechamente controlados para producir agujas fuertes con la cantidad justa de flexibilidad.
El ojo grande de la aguja está diseñado para acomodar hilos más gruesos, pero también hilos de sefa. Bañado en oro y con un pulido perfecto el ojal es muy cómodo para el enhebrado y evita todos los posibles enganches. o
Las agujas están niqueladas para que se deslizen sin esfuerzo a través de la tela y en este caso, las agujas de bordado vienen en una gama de tamaños y surtidos.
Este pack viene preparado con un tubo de plastico y tapón de corcho que garantizan el mantenimiento del producto. Este contiene 6 agujas de 0.61x36.5mm.
¡Perfecta para el bordado a mano!
Viene pulido y bañado en oro para que el enhebrado sea perfecto, y para evitar los posibles enganches del hilo.
Tiene las dimensiones perfectas para asegurar la comodidad. Cuerpo suave, afilado y largo para facilitar el trabajo a las especialistas del bordado.
Con este sistema Tulip nos facilita el trabajo ya que la aguja, con el afilado perfecto consigue pasar a traves de las telas con mucha suavidad y sin dañar el tejido. El sistema Easy-sewing esta diseñado para evitar el cansancio.
Con el lema “the last processes are our clients”, desde Tulip se trabaja controlando cada proceso y consiguiendo que cada uno de estos sea satisfactorio, por eso, siempre hablan del cliente como el último proceso, el último paso para conseguir el producto perfecto. Si el cliente no está contento es porque algún proceso anterior ha fallado.
Tulip presenta la simbiósis perfecta entre tradición y modernidad. Usa la mejor tecnología de vanguardia pero la une a la extensa tradición de la marca, la cual lleva más de 50 años trabajando.
El bordado es el arte o labor de embellecimiento de una tela mediante dibujos realizados con hilos y agujas, sobre un soporte de tejido que puede ser de cuero, seda, algodón, lana, lino, incluso metal para formar una decoración.
Los romanos llamaban a esta ornamentación plumarium opus, en virtud de la semejanza que tienen algunas de estas labores con la pluma del ave. También la denominaban opus phrygium ya porque la obtenían del comercio con los frigios quienes a su vez la traían de oriente o ya por suponerla de procedencia e invención frigia. Y como se consideraba en el bordado un procedimiento similar a la pintura llamaban a las vestiduras bordadas túnica picta o toga picta, o bientúnica palmata, aludiendo a los bordados en forma de palmetas con que las adornaban.
Los hilos que se emplean en el bordado son los mismos que sirven para el tejido pero sobre todo se utilizan los de seda, lana y lino, todos con variados colores y los de plata y oro con las formas diferentes que se adoptan en tejeduría. Con ellos, se ensartan a veces gemas, perlas, abalorios y lentejuelas metálicas.